Time Out Madrid celebra la primera edición de sus Premios Food & Drink
El restaurante Montia, el chef Hugo Muñoz, La Caníbal, TreZe y Angelita, entre los premiados de la noche
El jurado ha decidido bajo criterios de calidad, innovación, creatividad y alma Time Out
Más de 150 invitados han acudido a la gala que se ha celebrado en el madrileño Teatro Eslava
Time Out ha entregado esta semana sus primeros galardones Time Out Madrid Food & Drink en el Teatro Eslava. Los premios han distinguido, entre otras categorías: mejor restaurante, mejor chef revelación, mejor plato, mejor menú del día, mejor cóctel y mejor puesto de mercado. En total han sido diez los premiados, incluida una mención especial a la tradición, que han sido escogidos por un jurado de especialistas gastronómicos. La puesta en marcha de los Premios Time Out Food & Drink confirma, de nuevo, la preponderancia de la comunidad como gran capital gastronómica.
Más de 150 invitados han arropado a los galardonados de esta primera edición. “Hemos querido rendir homenaje a aquellos bares, restaurantes y profesionales de la hostelería que han convertido a Madrid en la potencia gastronómica que es hoy en día, tanto a los establecimientos de reciente apertura que abanderan la innovación como a los locales tradicionales que han asentado los pilares de las nuevas y brillantes generaciones de chefs establecidos en la ciudad”, asegura Marta Bac, directora editorial de Time Out Madrid, quien participó en la gala de entrega de premios junto con Elena León, city manager de la publicación, y Gorka Elorrieta, editor gastronómico de la misma.
El jurado ha estado integrado por expertos en la gastronomía madrileña como Javier Sánchez, Macarena Escrivá, Paula Móvil y Rodrigo Varona, así como el colaborador gastronómico de Time Out Madrid, Miguel Ángel Palomo, Gorka Elorrieta y Marta Bac, que han decidido bajo criterios de calidad, innovación, creatividad y alma Time Out, las propuestas finalistas.
Uno de los primeros protagonistas de la noche ha sido Hugo Muñoz (del restaurante Ugo Chan), reconocido con el premio a Mejor Chef Revelación. Muñoz vuela solo tras dejar grupos de peso en la restauración madrileña como Carbón Negro o Larrumba y comanda una propuesta fusión que parte de aires nipones para desembarcar en territorios reconocibles pero propios (sunomono de mejillón gallego al “hierro”, lengua de vaca ahumada, percebe de los pobres y verduras tsukemono), que van en pos de la raíz de las cosas. La suya está lejos de ser una cocina mestiza más. Es tan personal como alegre. Es a veces transgresión y vibra de la mano de la estacionalidad del producto que trabaja al tiempo que se advierte en la carta la herencia de mentores pretéritos (Abraham García y Ricardo Sanz). El jurado ha valorado la innovación de ese viaje de ida y vuelta entre Japón y Occidente, lleno de matices.
El menú del día puede evidenciar el temperamento de un buen restaurante: en las distancias cortas es donde se la juegan. Lo saben bien en TreZe, merecedor del premio de Mejor Menú del día, donde la estacionalidad manda sin ninguna duda. La balanza se equilibra entre la tradición y lo contemporáneo. El mercado y el buen hacer de Saúl Sanz son los que marcan la disponibilidad de unos u otros platos en el menú, pero lo que está claro es que esta casa se ha convertido en un lugar de peregrinaje imprescindible para los amantes de la gastronomía cinegética, que encuentran la autenticidad de la cocina de siempre aplicada a las mejores piezas de la temporada.
España es el país con más bares del mundo y esto ha convertido en tarea hercúlea la elección del Mejor Bar de Madrid. Dicho galardón ha recaído en La Caníbal, un vibrante punto de encuentro para todo aficionado al producto elaborado desde el respeto y con cariño, para feligreses de esa santa trilogía que forman el vino natural, la cerveza artesana y los quesos de autor. Javier Vázquez es el responsable desde hace más de tres lustros de todo un referente en Lavapiés. Lo más relevante de este necesario y atractivo proyecto son sus grifos. Ocho para el lúpulo y otros ocho para el terruño; estilos, variedades y fotos de los productores incluidas. El jurado ha valorado que se aprende tanto como se disfruta en un ambiente de gran versatilidad.
El Kingston Negroni de la coctelería Momus ya es oficialmente, el Mejor Cóctel de la ciudad. Y es obra de Alberto Fernández, que cada temporada se dedica a reinventar su esmerada apuesta, una caja de sorpresas organolépticas para el cliente. Su reinterpretación del popular cóctel italiano, pero con dos tipos de rones (de Jamaica y Antigua y Barbuda), merece ser distinguida como la mejor propuesta coctelera de la ciudad según el jurado de los Premios Time Out Madrid Food & Drink.
El Premio The Bar World of Tomorrow ha sido otorgado conjuntamente con Pernod Ricard y debe su nombre al programa de formación que tiene el Grupo para formar a la hostelería en materia de sostenibilidad. El galardón, que reconoce las direcciones más talentosas, tanto a nivel humano como medioambiental, ha recaído sobre una de las coctelerías más top de la ciudad, Angelita, que en estos últimos años ha recibido numerosos galardones afianzando su ideario, liderado por Mario Villalón y Massi Berardi. La suya es una firme apuesta por la sostenibilidad, lo local y la familia (del huerto paterno salen muchos de los ingredientes para sus creaciones) y la llevan a cabo sin coctelera ni vaso mezclador, echando mano de técnicas más propias de la repostería y la alta cocina.
Por su parte, Hijos de Tomás ha sido reconocido como el local que ofrece la Mejor Fiesta Nocturna de la capital. La Familia La Ancha, con Nino Redruello al frente, acaba de abrir esta primera aventura nocturna del grupo, un escondite con el piano como protagonista en pleno centro para acomodarse en sus sofás, entregarse a sus tragos o bailar hasta la madrugada.
A los responsables de El 2 (Vallehermoso), les llaman Los Javis del mercado. Llevan más de un centenar de platos creados en estos dos años y medio porque son gente curiosa, enemigos del aburrimiento. Eso sí, la ensaladilla, la presa o los callos permanecen inmutables en una admirable cocina que vive por y para la temporada y que mima el producto. Su bodega es un feliz patio de recreo. Y por estos motivos, se han alzado con el premio Time Out Madrid Food & Drink en la categoría de Mejor Puesto de Mercado.
El Ceviche de vieira del restaurante Llama Innes, según los Premios Food & Drink de Time Out Madrid, el Mejor Plato de la capital madrileña y por sí solo ya merece la visita a este restaurante que Erik Ramírez y Juan Correa trajeron de Nueva York. Cocina peruana contemporánea que viaja a los orígenes, donde se reencuentra las vertientes criolla, amazónica, andina o nikkei al tiempo que señala un camino futuro. Platos muy estéticos, imaginativos, inesperados que combinan con una línea de cócteles deslumbrante y unos postres que traen nuevos sabores como la lúcuma o la miel de Oxapampa.
El premio al Mejor Restaurante ha recaído en Montia de San Lorenzo de El Escorial. Tras el incendio de parte del restaurante, Dani Ochoa reverdeció la propuesta (de lo que llegaron a llamar el “Noma español”) en otro local, ahora más amplio y versátil, pero sin irse de San Lorenzo de El Escorial. La cocina se encuentra entre una sala de atmósfera nórdica, donde la madera, las pieles de las sillas de cuero y la chimenea son protagonistas, y otra con vistas a su propio huerto. Se mantiene ese fulgor singular en su refinada línea salvaje. Setas, trucha, judías de Peguerinos, piezas cinegéticas, hierbas aromáticas recogidas en el día, bodega de vinos naturales y, claro, esos legendarios callos. No falta nada y todo está en su sitio.
Mención Especial a la Tradición
Time Out reivindica en esta categoría locales que, desde hace décadas (o desde casi un siglo, en algún caso) han mantenido una tradición y una forma de hacer que ha marcado generaciones. La importancia de la tradición no es hacer siempre lo mismo, sino hacerlo sin bajar el nivel, con una excelencia que convierte a estos restaurantes en clásicos. Y el restaurante Asturianos se ha hecho con la Mención Especial a la Tradición.
Este local está en boca de todos los mejores paladares de la ciudad. La muy querida Julia Bombín es la artífice de esas portentosas verdinas, de ese bonito con tomate, de las carrilleras al vino tinto, del flan de queso… La esplendorosa oferta se extiende también a su bodega, ilustre como pocas en la capital, más aún si apreciamos la humildad que viste este espacio. Aplauso merecido para sus hijos, siempre atentos a novedades tanto en cocina como en caldos.
Al finalizar la entrega de reconocimientos, Elena León, city manager de Time Out Madrid, ha compartido el mensaje de felicitación enviado por Luis Suárez de Lezo, presidente de la Academia Madrileña de Gastronomía. Entre otras palabras, señalaba haberse llevado “una alegría enorme al ver los premiados de esta primera edición. Por una razón fundamental. Son una buenísima representación del gran momento que vive la gastronomía madrileña».
Por último, León ha resumido el sentir de esta primera edición asegurando que «los Premios Time Out Food & Drink son una celebración de la inspiración. La esencia de Time Out es inspirar cada día a los ciudadanos. Y, ¿cómo lo hacemos? Poniendo en valor la creatividad, el conocimiento, el trabajo y la perseverancia de tantos negocios y proyectos que hacen de Madrid un lugar único. Ese es el sentido de estos Premios, una fiesta de inspiración, creatividad, trabajo duro y perseverancia».